Dificultad: baja
Tiempo de preparación: 120 minutos
Un plato sencillo de preparar, sabroso y muy sano. La clave, aunque parezca una tontería, es el corte de las judías y de la patata, y tenerlo un largo tiempo hirviendo, primero en agua y luego cociendo con la salsa de tomate.
Ingredientes para 2 personas:
- 600g. de judías verdes
- 3 patatas medianas (unos 400g.)
- 1 bote de tomate natural troceado (pequeño)
- Orégano
- Aceite de oliva
- Sal
- Azúcar
Preparación:
1. Poner una olla grande con unos 2 litros de agua, sal y un chorro de aceite de oliva.
2. Pelar y cortar las judías verdes en trozos pequeños. Pelar las patatas y cortarlas en trozos pequeños siguiendos este procedimiento: se corta con el cuchillo hasta la mitad aproximadamente y después se arranca el trozo para que la última parte no quede lisa.
3. Echar la verdura en la olla y dejar hirviendo durante 1 hora aproximadamente a fuego medio. Añadir una cucharada pequeña de orégano.
4. Cuando la cocción haya terminado reservar el caldo de la verdura y apartar la verdura. En la olla vacía, echar un chorro de aceite en la base y cuando esté caliente añadir el tomate natural troceado. Remover constamente durante unos 5 minutos a fuego medio-alto, añadir un poco de sal y una cucharada de azúcar.
5. Cuando el tomate haya reducido añadir la verdura y remover bien. Bajar el fuego y dejarlo 15-20 minutos para que las judías cojan el sabor del tomate.
- En lugar del tomate natural troceado puede emplearse tomate frito con cebolla (el de Hacendado está bastante bueno) que reduce el tiempo y da un toque sabroso.
- El caldo de las judías está espectacular con unos fideos finos para la cena, ¡¡no lo tires!!
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